Es importante que quienes son menores de edad realicen un uso crítico de la tecnología porque de ese modo no sólo pueden conseguir saberes que quizás no llegarían con rapidez aquí (como es el caso contado del chico de Taiwán) o estar al tanto de modos de defender el medioambiente, además de conocer los derechos propios, sino que también podrían exponerse a peligros (personas desconocidas, violencias digitales, exposición de datos e información personales) de los que no sepan cuidarse.